Arriba, imagen de la Hoguera de San Antón en Torrero (foto: Primo Romero). Abajo, Hoguerica de la Madalena del pasado año (foto: Kanibal Esmiz)
La Hoguerica de San Antón del barrio de la Madalena es el reflejo invernal de la hoguera veraniega de San Juan, más tradicional y populosa. Se ha celebrado en los últimos 5 años y pretende “recuperar ese espacio en el que se reunía todo el pueblo en la calle, convirtiendo el rito del fuego en una auténtica fiesta para animar la larga y fría noche de invierno”. Un lazo de unión en los vecinos y vecinas por un barrio vivo. “Queremos un barrio vivo y lo expresamos siendo nosotras y nosotros quienes damos vida a nuestras calles, a nuestros centros de enseñanza, al pequeño comercio. Espacios vivos para niños y niñas, para mayores, para quienes nos visitan… Para todos y todas, en definitiva ¿Te apuntas?”.
Llaves de la República para Manuel Arcón Pérez y Mostrenco para el consejero Oliván
Por su parte, la Asociación Vecinal de Venecia – Montes de Torrero convoca al barrio en el cruce de las calles Venancio Huarte y Biescas desde las 18.30 horas para celebrar la Hoguera de San Antón. La asociación entregará las Llaves de la República, símbolo del reconocimiento de las y los vecinos por mantener vivo el espíritu de “este barrio amable y amigable”, al escultor aragonés Manuel Arcón Pérez, nacido en Graus (comarca de la Ribagorza) en 1928, y que tuvo su taller en el barrio de Torrero durante 50 años.
“Es una suerte tener y haber tenido entre nosotros a un artista de la categoría de Manuel Arcón. Su trabajo es de una cantidad y, sobre todo, una calidad tan enorme que parece mentira que lo haya podido hacer un solo hombre. ¿En qué condiciones? Hay que decir que no siempre con facilidades y viento a favor, precisamente. Nos ha dado una lección magistral con su ejemplo: A las dificultades se les puede vencer con trabajo, con paciencia, con perseverancia, con la fidelidad a unos principios y con la fe en la vida, en el torrente inagotable de la vida”, afirma Gregorio Millas.
“Manuel Arcón ha influido a gran cantidad de escultores y escultoras, a pesar de su discreción y de ser pájaro solitario, como otros artistas ensimismados en perseguir la perfección y lo sublime. Manuel Arcón me ayudo decisivamente en la realización del Cantero de Torrero, que en estos casi 25 años se ha convertido en uno de los emblemas de este barrio de trabajadores. Sin su ayuda no hubiera sabido cómo resolver los problemas de la sólida estatua. Y siempre he pensado que si la escultura la hubiera realizado él, de cabo a rabo, habría sido una obra de arte más completa. Todo esto no es poco más que una anécdota. Lo importante será ahora dar las gracias a Manuel por la magnífica contribución que está haciendo a la integridad del arte. Y también felicitarle por haber conseguido llegar a ser uno de los más ilustres aragoneses de su tiempo” añade Millas.
El Mostrenco, adjetivo coloquial que se refiere a “ignorante o tardo en discurrir o aprender”, irá destinado este año al consejero de Sanidad del Gobierno aragonés, Ricardo Oliván.
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